Me llamo Sònia Vila y nací en Mallorca y, aunque de niña no soñaba con ser psicóloga, sí tenía muy claro que de mayor quería ayudar a la gente de algún modo.
Siempre me ha gustado estudiar, formarme, aprender y descubrir, así que cursé estudios de naturopatía y luego me decidí a probar con psicología y psicopedagogía. Después (y gracias a una conversación que tuve con una amiga), decidí adentrarme en el mundo de la psicología clínica.
Mientras todo eso pasaba, trabajaba en la empresa de mi familia. Por aquel entonces vendía cosmética y perfumes, y lo que más me gustaba de mi trabajo era la oportunidad que me deba de conocer gente nueva y charlar con las personas que atendía.
Durante esta etapa de mi vida, mi madre enfermó y, en aquel momento, encontré mi lugar a su lado, acompañándola y cuidándola. De hecho, en las largas tardes en el hospital me di cuenta de que tenía mucha facilidad para acompañar a los enfermos y a sus familiares, y fue entonces cuando comprendí cuál era mi camino.
Me di cuenta de que cuando la gente entra en crisis necesita la ayuda de un profesional. De hecho, yo misma iba a terapia por aquel entonces porque me resultaba muy difícil gestionar la ansiedad y mis miedos en el día a día.
La psicóloga a la que fui me ayudó muchísimo, así que seguí con mi formación en psico-oncología y psicología de emergencias, siempre enfocada en trabajar la ansiedad que tan limitante había sido para mí.
Formé parte de varios proyectos en una clínica de Palma y descubrí lo que se me daba bien y me hacía sentir realizada como persona y como profesional.
Un tiempo después, intuí que era el momento de abrir mi propia consulta. Deseaba crear un espacio acogedor y seguro para las personas que me eligieran como acompañante en su camino de crecimiento y calma interior.
Compagino mi trabajo en consulta con el GIPEC (Grup d’Intervenció en Psicologia d’Emergències i Catàstrofes), que todavía hoy me enseña en cada intervención mía o de mis compañeros.
Con los años (y la experiencia, claro) he aprendido que cada uno de nosotros es único y bello tal cual es, pero que a veces nuestras creencias, experiencias y miedos nos bloquean y sufrimos. Así que mi objetivo en consulta es que mis pacientes aprendan a observarse desde otro lado y con una mirada distinta. Y lo cierto es que me encanta y me llena que ese sea mi trabajo
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